domingo, 18 de enero de 2015

Entrelazados - Capítulo 41

Los meses pasaron, y el verano se estaba acercando. El Club Deportivo Lion perdió la final contra Espassa Fútbol Club, así que este año no había motivo para festejar. Todos los chicos estaban un poco desilusionados, pero a la vez se la veían venir ya que Espassa es uno de los mejores equipos de toda la categoría.
Cada uno de los chicos había continuado su vida con total naturalidad, salvo por algunas excepciones.

Macarena llegó a un peso habitual, y con gimnasio y dieta estricta para no caer nuevamente en la bulimia, y mucho menos en la anorexia, mantuvo un balance total, y también acompañaba la ejercitación de su cuerpo con gimnasia que hacía entre tres y cuatro veces por semana. Su cuerpo se estaba tornando realmente lindo y agradable a la vista, y ella cuando se veía al espejo, se gustaba. Ni hablar de su novio Pache, que se había enamorado de ella cuando peor se encontraba anímicamente, y ahora que se sentía hermosa, él se enamoraba cada día un poquito más. Por más que en una pareja te de amor lo que es el otro como persona, lo que te genera físicamente es muy importante, y Pache cada segundo que pasaba le gustaba y le atraía Macarena un poco más. Para colmo, aprobó todas las materias de la facultad y terminó el Ciclo Básico Común para empezar el primer año de la carrera que tanto la apasionaba.
Pache, por su parte, continuaba trabajando intensamente, y se propuso hacer un curso de árbitro durante el verano...¡Realmente le encantaba!.
La pareja de ellos dos, reconocida como "Mapache" por el grupo ya que hacían todo juntos, tenían pocas discusiones. Casi siempre que peleaban era porque Pache se ponía loco por los celos. A veces exageraba demasiado y era muy extremista. No permitía que nadie en la calle la mire siquiera a Macarena, incluso las mujeres. La quería sólo para él, y ella era todo amor para su novio, y a veces no toleraba su falta de confianza, por lo que discutían, pero a los cinco minutos se amigaban y transcurría todo como siempre.

Si había una persona que dio un giro de trecientos sesenta grados en menos de un año, esa había sido Malena. En más de una ocasión, se acercó a Nicolás para conversar, y también a Santino, pidiendo disculpas por los errores del pasado, y generando que terminen siendo ellos los que le pedían disculpas por haberla lastimado. Si bien fue una sorpresa enorme verlos a Ale y ella juntos, todos se fueron acostumbrando y decidieron darle una nueva oportunidad a Male, advirtiéndole de entrada que si lastimaba al gordo, todos le harían la cruz para siempre.
A Malena ya le gustaba Alejandro como era, y no tenía interés alguno en cambiarle nada en absoluto, pero él mismo se sentía un poco desentonado al estar a su lado.
- Cuando vamos por la calle, la gente seguro piensa: "¿qué hace ese gordo con esa chica tan linda? ¿Qué le vio?".- le decía Ale a Malena todos los días.
Ella le dedicaba una sonrisa, lo miraba fijo y le respondía con ternura:
- Para mí sos el más hermoso del mundo, y eso solo te tiene que importar, no lo que digan los demás.
Pero a Ale no le bastaba, así que decidió empezar a hacer dieta y gimnasio intensamente. Poco a poco fue bajando más de peso, y aún le falta moldearse un poco, pero ya había dado un cambio radical, y Malena le advertía todo el tiempo que no siga más con eso y que no se obsesione, porque le generaría problemas de salud también.
Advertido por su novia, Ale le hizo caso y se estancó en un peso ideal para él, pero igual le seguían diciendo "gordo".

Celeste y Bautista continuaron juntos como siempre, con muchas charlas profundas a la luz de las velas, y con un montón de planes juntos. Ahora que Celeste finalizó la facultad por este año, aunque le faltó aprobar dos materias, se propuso buscar un trabajo para ahorrar plata y poder mudarse con Bauti a un departamento más chico, vendiendo la casa de la abuela de él. La morocha estaba realmente emocionada por los cambios, y le encantaba también recibir el apoyo de sus padres. Por otro lado, estaba demasiado contenta ya que su hermano Emiliano la nombró madrina del hijo que nacía en los próximos meses, así que era un motivo más que suficiente para estar exaltada y deseando que el bebé llegue.
Con Bauti no peleaban nunca, pero a veces tenían ciertas diferencias que los hacía enojarse a ambos y no hablar por varias horas, hasta que, generalmente ella, volvía a ceder, daba el brazo a torcer y las cosas se solucionaban.
La última gran batalla había sido cuando Celeste percibió los sentimientos de su novio hacia Vera. Realmente no la odiaba a ella porque no tenía la culpa de que Bauti se haya enganchado, pero le daba muchos celos y dolor el sólo hecho de saber que su novio estaba pensando quizá en otra mujer. Él le explicó, luego de una intensa charla, que estaba un poco confundido pero que a su vez no tenía dudas de estar con Celeste, y al mismo tiempo lo ponía como loco saber que Vera estaba iniciando una historia con Nicolás.
Costó muchísimo remontar la situación después de esa conversación, pero ambos llegaron a la conclusión de que la solución era una sola: tomar distancia de Vera. A Bautista lo apenaba muchísimo tener que hacer esto, pero era lo mejor, ya que sólo le interesaba estar con Celeste y de verdad estaba muy enamorado, y lo comprobó las veces que intentó imaginarse junto a Vera o besándola, y la verdad que no le agradó demasiado esa imagen.
Una vez más, esta pareja pudo salir a flote a pesar de los problemas, y ahora estaban mejor que nunca intentando pensar un futuro juntos con muchos planes y proyectos por alcanzar.

Le mandó mensajes, lo llamó, fue a la casa, se lo intentó cruzar, le preguntó a medio mundo por él, pero Vera sólo recibía rechazos de parte de Bautista, hasta que un día, agotada de rogarle que le hable y asustada pensando que se había enojado por algo, lo prepoteó cuando salía del club ya que ella iba a buscar a Nico, y le insistió largo rato para que Bauti le dijera qué le sucedía con ella.
- Necesito saber qué mierda te pasa conmigo, boludo. Vos no sos así...¿Te hice algo que te jodió? ¿Metí la pata con algo? ¿Conté algo que no tenía que contar? ¿Te pudriste de mis mambos y de ser mi amigo? ¿Te...?.
- ¡No! ¡No es eso!.- interrumpió Bauti ya sacado de sus cabales.
- ¿Entonces qué es?.- preguntó Vera.
- Mirá, no es fácil de explicar, y tampoco tengo por qué hacerlo. Ya fue, boluda.- dijo él.
- Por favor, Bau.
"Bau". Qué tierna era...
- Estoy confundido con vos, boluda. Ya está. Es eso. ¿Feliz?.- respondió.- Y para estar bien en mi relación con Celeste necesito tomar distancia de vos. Tan simple como eso.- Bautista dio media vuelta y se fue, dejando a Vera tras de sí.
- ¡Sos un cagón!.- le gritaba ella, entre otras tantas cosas.
Al menos ahora Vera ya tenía en claro qué era lo que sucedía, así que decidió no molestar más a Bautista ni insistir en continuar su amistad ya que no había marcha atrás...O eso creía.

Luego de aquella noche fatal en la casa de Bautista, Lautaro y Rocío decidieron intentarlo de nuevo. Ya pasaron un par de meses de esa noche, y la pareja se encontraba mejor que nunca.
Ella continuaba trabajando en el estudio jurídico de los padres de Santino, con quien había forjado una intensa relación de amistad, y también decidió anotarse en diseño de indumentaria en la Universidad de Palermo para el año siguiente, así que estaba realmente entusiasmada por todos los cambios en su vida. Pero si había algo que todavía estaba pendiente en su camino, era Nicolás. Cada vez que lo veía en algún encuentro del club o reuniones de amigos, ambos se ignoraban por completo, pero sabían los dos que todavía había una llama encendida, la cual era muy difícil de apagar.
A decir verdad, Rocío no estaba enamorada de Lautaro. Lo amaba, eso era cierto, pero más que nada era por lo mucho que se conocían, porque fue su primer amor, y además porque él era un tierno total, pero le costaba horrores volver a enamorarse. Él no se daba por vencido y luchaba día a día por lograr conquistarla. La iba a buscar al trabajo todos los lunes, miércoles y viernes, los sábados ella lo veía jugar a la pelota y después hacían una salida linda, le regalaba cosas tiernas, le llevaba una rosa cada domingo y la elogiaba cada vez que se volvían a encontrar. Lautaro la hacía sentir toda una princesa, pero de todas formas ella aún no conseguía enamorarse de la forma que quería. Se esforzaba todo el tiempo por sentir algo intenso por Lauti, pero no era lo mismo que hace un tiempo atrás. Lo amaba con locura, sí, pero más por los recuerdos compartidos y por la compañía que por lo que era él realmente como persona...
Sin embargo él no lo notaba.
Lautaro creía que estaba haciendo las cosas bien, y no se sentía incómodo tratando a Rocío como una reina día y noche, al contrario, lo satisfacía.
Varias veces fue advertido por Alejandro, Pache, Bautista y Santino, que le decían constantemente que deje de estar tan atrás de ella, porque la iba a terminar aburriendo de nuevo.
- Ya sabés cómo es Rocío, hermano.- le repetía Pache.
- Es re histérica.- agregaba Ale.- Lo que menos tenés que hacer es rogarle o demostrarle que estás para ella.
- Mal, posta.- acotaba Bauti.
- Lo ideal es que ella piense todo el tiempo y viva con el miedo a que te va a perder.- aconsejó Santi. 
Y esas palabras quedaron muy grabadas en la cabeza de Lauti...

La relación entre Vera y Nicolás quedó estancada para siempre en un "nos estamos conociendo" que nunca florecía, y tampoco se terminaban de conocer. Ella soñaba con avanzar, con poner un cambio en la relación que los haga mejorar a los dos y tener, al menos, algún título.
- Si nos somos fieles, estamos siempre juntos, lo sabe todo el mundo...¿Qué más falta para que tengamos un título?.- le preguntaba ella a Nicolás casi siempre.
- Estamos bien así, Vera.- le decía él, y la joven, con tal de no perderlo, soportaba cualquier cosa, hasta los desplantes más absurdos que ninguna otra mujer toleraría.
Varias veces la había dejado plantada y aparecía después de dos horas diciéndole que se había quedado dormido, o que "colgó" hablando con los pibes. Tampoco quería conocer a los D'Agostino, y esto a Vera la mataba de angustia, porque quería de verdad que sus padres lo conozcan, o también ella conocer a los Minaglia. En varias oportunidades lo encontró mirando fotos de Rocío, pero como siempre decidió callarse la boca y tolerar todo, simplemente para darle los gustos a él, no pelear, y así tampoco correr el riesgo de perderlo.
Lo que Nicolás pensaba era que le gustaba la relación así, y por supuesto, ¡él estaba en su comodidad! La apreciaba mucho a Vera y no quería perderla, pero la realidad era una sola y era que Rocío era Rocío, y nadie podía reemplazarla nunca. Cuando la veía, moría de ganas de abrazarla, de besarla. La deseaba como nunca, y también se sentía muy buitre por pensar esas cosas de la novia de un amigo, pero le era imposible no sentirlo. Sin embargo, seguía con Vera porque tenía esperanzas de enamorarse algún día de ella, y tampoco pretendía lastimarla, y ni siquiera se daba cuenta que lo hacía de todas formas.

Maca y Pache se encontraban en la casa de la morocha cuando a ella le llega un mensaje.
- Hola, amor.
Maca miró quién era y cerró la conversación sin contestar. Al notar este gesto, Pache le preguntó quién era y ella le contestó que no importaba.
La joven se fue a bañar y dejó su celular arriba de su mesa de luz, descuidadamente. Pache no dudó ni un segundo y lo agarró, desconfiado totalmente. Al leer el mensaje se puso como loco, era de un número que no estaba agendado, entonces decidió esperar a que salga su novia del baño para pedirle explicaciones.
Maca salió del baño tranquila, normal y vio que su novio estaba sentado en la punta de la cama mirándola fijo. En ese momento se dio cuenta que algo había pasado.

- ¿Qué pasó, amor, que tenés esa cara?.- preguntó ella.
- ¡Amor! Já.- rió Pache de manera irónica.- Justo lo que te pusieron en el mensaje que te mandaron..,

- Marian, ¿revisaste mi celular?- preguntó Maca con un tono no muy agradable. Si había algo que odiaba, era que le toquen sus cosas, mucho más si era el celular.
- Sí, bueno, lo revisé. Macarena, encontré un mensaje de un pibe que te decía "amor". ¿Qué onda, boluda?.- contestó Pache enojado.
- ¡No estás confiando en mí! ¿Te das cuenta? Yo no reviso tu celular, no te hago esas cosas. Y el pibe, ¿sabés quién es? ¡Mi primo!.- dijo Macarena un tanto irritada.
- Macarena, conozco a todos tus primos, y ese pibe...¡no es tu primo!.- gritó Pache muy seguro de sí mismo.
- ¡Vos conocés a mis primos de acá, Mariano! Hay una parte de mi familia que no conocés...Este pibe vive en Río Negro y no lo veo nunca. Igual mi primo no es lo que importa, lo que importa es que vos estás desconfiando todo el tiempo de mí...¡Estoy harta!.-contestó Macarena muy enojada.
- Perdón, gorda, tenés razón.- dijo él aunque seguía un tanto ofendido.- Yo estuve muy mal, pero entendeme a mí también. ¿Que harías vos si leés un mensaje así? No te olvides del sueño que tuviste esa vez donde flasheaste lo mismo que yo, y eso que fue sólo un sueño.
- Primero que no te revisaría el celular, Marian, estás desconfiando todo el tiempo y me cansé. Ya esta, ya fue. Por favor, andate porque estoy cansada y si te quedás vamos a seguir peleando.- dijo Maca.
- Está bien, me voy...¡Pero a la noche vuelvo! Perdoname de nuevo, te juro que no lo hago más.- comento Pache mientras salía de la casa de Maca.
Todo el camino, Pache fue pensando en el primo de Maca. En realidad, su novia le había hablado sobre unos primos en Río Negro pero, ¿cómo se iba a imaginar él que justo le iban a poner "amor"?. La verdad era que en serio estaba arrepentido por la desconfianza que le tenía a su novia, así que antes de llegar a su casa, frenó en una juguetería y le compró un regalo fantástico.

En su facultad, Santino conoció a una chica llamada Emma, que a decir verdad no le daba mucha bolilla. Ella era de pelo negro azabache, lacio y le llegaba a la cadera. Sus ojos eran grises y también cambiaban con el tiempo. Tenía un acento muy interesante por haber vivido tanto tiempo en Francia, y eso seducía a Santino mucho más.
Como él era muy orgulloso y no soportaba perder nada, la persiguió por todos lados, de manera disimulada, para conseguir que ella le preste un poco de atención. Finalmente, lo logró y Emma aceptó una cita con él.
Los padres de Santino eran dueños de un yate que estaba ubicado en Nordelta, por la zona de Tigre donde tenían su casa quinta de fin de semana, a la cual Santi no iba hace años, pero esta vez decidió hacer una excepción y llevar a su conquista allí. Pasaron el fin de semana entero navegando por el río, conociendo bien la zona, tomando champagne y metiéndose al yacuzzi. Cuando por fin Santino logró desvestirla, besarla y tener sexo con ella, no le habló nunca más.
Los hombres mujeriegos nunca cambian, aún cuando dicen estar enamorados.

De Pedro nadie sabía nada, tan sólo Bautista y Celeste. Nadie se animaba a indagar por temor a recibir una mala respuesta, o tampoco les interesaba mucho.
Todos los fines de semana llamaban de la clínica para hacer el parte médico ya que nadie iba a visitar al joven. Bautista había perdido todo el interés y las ganas que, por más que Celeste lo impulsaba a ir a ver a su hermano, no tenía ni un poco de esperanza en que se mejore, así que simplemente optó por dejarlo en paz y que se arregle solo, pero para las fechas importantes o para saludarlo y ver cómo estaba, al menos lo llamaba por teléfono y eso le parecía a Bautista más que suficiente...Para colmo, Pedro también estaba enojado con él, y había hecho un grupo nuevo de amigos un poco más sano, pero seguía drogándose en cada oportunidad que podía, ya que por más que sea una granja de rehabilitación, las drogas llegaban igual.

Bauti salió de su casa temprano, se dirigía al trabajo, cuando en la vereda de enfrente vio parada a Vera, ya que justo pasó por delante de la facultad de ella pues trabajaba a dos cuadras simplemente. La joven había ido a retirar sus últimas notas de la facultad. Bauti ni dudó y se acercó a saludarla. 
Vera, cuando lo vio, se sorprendió y se alegró mucho. 
- ¡¡Hola, Bau!! ¿Cómo estás, tanto tiempo?.- le dijo Vera mientras lo saludaba con un beso en el cachete y a Bautista se le erizaban todos los pelos de la piel.
- Hola. Yo todo bien...¿y vos?.
- Todo bien, hace mucho no hablamos...¿Qué onda tu vida? La estuve viendo a Celes en cumpleaños y cosas así, pero vos nunca vas...- preguntó Vera cuidadosamente.
- Sí, boluda, hace mucho que no hablamos. Pero bueno, vos sabes por qué...Y además, qué se yo...No quería complicar las cosas y tampoco quería que lo que me pasaba arruine mi relación con Celeste después de todo lo que nos costó estar juntos...Vos sabés a qué me refiero.- comentó el joven mirando hacia el piso.
- No, obvio.- dijo Vera entre risas.- No valía la pena arruinar la relación con Celes por esa confusión tonta.- agregó irónicamente.
- No, Ve, a mí me pasaba algo groso con vos.
Se produjo un silencio incómodo que Vera no quiso romper, entonces se animó Bautista a continuar.
- No estaba bueno que sigamos teniendo esa relación, tan apegados.- dijo él.
- ¿Por qué no? Siempre soñamos ambos con un amigo del otro sexo, y una vez que lo encontramos, tiraste todo al carajo por una confusión.- dijo Vera haciendo memoria.- Encima me bloqueaste de WhatsApp, no me abrías la puerta de tu casa, no me contestabas el teléfono, nada...
- Me iba a confundir más, además...Ahora estás re bien con Nico, ¿o me equivo? Yo ni idea porque no hablo mucho con él ya.- preguntó Bauti.
- Estamos re bien, pero nada formal todavía, seguimos conociéndonos, así que creo que sirvió que nos alejemos para no perjudicar las relaciones de ninguno.- ambos sabían que Vera mentía, y que morían de ganas ambos por contarse todo, abrazarse y recuperar la confianza de antes.
- Bueno, mejor. Che, ¿hoy vas al Álamo con los chicos?.-preguntó Bau.
- Sí, sí, voy con Maca y Pache, me encuentro con Nico allá. ¿Vos vas?.- preguntó ella.
- ¡Sí, obvio! No tenía ganas porque no quería cruzarte, pero ahora que nos vimos ya fue.- dijo Bauti riéndose.- Bueno, nos vemos ahí entonces. Me voy porque llego tarde al trabajo sino, Ve. ¡Me gustó encontrarte de nuevo!.- dijo mientras saludaba a su ex mejor amiga.
- Dale, Bau, ¡nos vemos esta noche!.
Al alejarse, Bauti pensaba en cuánto había extrañado a Vera, ya que hacía mucho que no hablaban porque Celes le había pedido que se aleje de ella porque se había dado cuenta que a él le pasaban cosas con la rubia.
Vera, por su parte, también pensaba que había extrañado a Bauti, pero le gustó alejarse de él, porque le hizo comprender que en realidad siempre quiso a Nico y Bauti siempre fue sólo su mejor amigo. A veces las distancias salvan las relaciones...

Los chicos estaban ansiosos esperando la noche, ya que iban al Álamo y sabían que se reencontrarían todos con todos.
Tenían todo arreglado: Bauti, Celes, Ro y Lauti iban juntos. Pache y Maca iban con Vera, ya que ella no quería cruzarse ni con Bauti ni con Rocío, entonces le preguntó a su amiga si podía ir con ella porque Nico iba con Santi y el gordo Ale. Male iba con sus amigas.
Eran las doce de la noche cuando Lauti paso a buscar a Bautista y se dirigieron a buscar a sus novias, que estaban en lo de Rocío. Cuando las chicas salieron, los dos jóvenes no podían creer lo lindas que estaban. Celes tenía un vestidito floreado cortito y unas franciscanas negras. Ro tenía una musculosa blanca con espalda descubierta y una pollera larga fucsia...¡Estaban divinas! Subieron al auto, saludaron a los chicos y partieron.

Apenas entraron, Rocío vio a Nicolás en la barra y junto a él, Ale y Santino tomando unas cervezas. En ese momento, se le cruzó el recuerdo de la primera vez que se vieron, cómo Nicolás le había volcado toda su bebida y la manera en la que le pidió predón con esa sonrisa compradora. Luego de recordar todo esto, lo primero que hizo fue ir a saludarlo.
Por su parte, Nicolás, cuando vio entrar a Rocío, en lo primero que pensó fue en lo linda que estaba la rubia y en lo mal que le hacía verla con Lautaro. Cuando vió que Rocío se acercaba, se puso de pie., El corazón le iba a mil, estaba nervioso como si fuera la primera cita.
- Hola, Nico.- dijo la rubia, deseando que Lautaro no esté viendo esa escena.

- ¡Hola, Ro!.- dijo él, emocionadísimo.- ¿Cómo estás? Tanto tiempo...- comentó Nico mientras la saludaba con un beso. 
- ¡Todo bien!, ¿vos? Sí, ¡hace mucho que no te veía! ¿Qué onda? ¿Qué es de tu vida?.- preguntó Rocío. 
- Mi vida tranquila, siempre lo mismo. Vos seguís con el gil de Lauti por lo que veo...- dijo Nico entre risas.
- Sí, ¡sigo con Lau! Y vos con Vera, ¿no?.- Rocío esperaba escuchar una respuesta negativa. 
- Sí.- Uf.- Pero sigo pensando en vos...No te fuiste nunca de mi vida.- le dijo él con un tono un poco chamuyero.
- Bueno, basta...¡Dejá de chamuyarme, bobo! Además yo estoy con Lautaro y vos con Vera, así que ya fue.- comentó Ro muy segura.
- No te chamuyo, ¡te digo en serio, Rocío!.
- Bueno, me voy, nos vemos mas tarde...- le dijo Rocío con un tono cortante y frío mientras se alejaba.
La verdad era que ella se moría de amor con las cosas que le decía Nicolás, pero también entendía que ella estaba bien con Lauti, lo amaba y que Vera y Nico estaban en algo, entonces prefirió no meterse y seguir su vida como lo había hecho estos meses. 

Vera, Maca y Pache se encontraron en la casa de Maca y fueron juntos al Álamo. Al entrar, Vera vio a Rocío y Nicolás hablando. La situación no le gustó en lo más mínimo, pero decidió no acercarse para no molestar a Nicolás.
Cuando Maca vio que Rocío y Nico estaban hablando, lo primero que hizo fue llevarse a Vera de ahí para que no esté pendiente de su chico, así que fueron a saludar a Celes, Lauti y Bauti que se encontraban sentados en una mesa. 

Cuando Rocío termino de hablar con Nico, se acerco a la mesa. Enseguida se acercaron Santi y Nico. El gordo estaba esperando a Male en la barra...

A mitad de la noche, Maca le pidió a Vera que la acompañe al baño y ésta accedió. A su vez, Rochi y Lauti se encontraban en la barra pidiendo algo para tomar. 
Nico estaba dando una vuelta solo cuando de repente le tocan el hombro y se da vuelta. Era una chica rubia, ojos verdes, dientes perfectamente blancos y brillantes, portadora de una sonrisa divina. Al verla, Nico se quedó paralizado, no sabía cómo reaccionar, se notaba que la chica estaba pasada de copas. Sin dudarlo, la morocha se abalanzó a Nicolás y lo besó. Por supuesto y sin pensarlo, él siguió el juego, y justo en ese instante percibió cómo Vera y Rocío lo estaban mirando.


Continuará...

20 comentarios:

  1. ¡Es genial! pero no lo pueden cortar ahí, estaría bueno 2 posts por semana, por favor!.
    Que Nico conozca a otra chica, y Vera a otro chico, no me gusta su pareja es como muy aburrida... y la de Rocio y Lau también. De Bautista y Celeste no me voy a cansar nunca. En el alamo se conocieron todos, esta muy bueno. Que se formen más parejas, jajaja.

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  2. Geniaaaaal Bau y Celes por siempre! Y quieeeeen es la chicaaaaaaaaa! Siempre son geniales tus capítulos! Felicidades, buena vidaa!

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  3. Dios ame este capitulo!!! Pareciera que todo volvió a empezar, me alegra que siga algo entre rrocio y nico son un amorrr!!! Muero pq por fin puedan estar juntos y me gusta como van las cosas entre vera y bauti porque podría pasar como no, ojala si! Geniaa

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  4. Me encantaaaa por dios ro y nico lo mas juntos ♡♡♡♡♡ ro y lauti son muy aburridos ya

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  5. Nicolas con celestee??? Sijiiii y vera y bautiii

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  6. ESTOY SEGURISIMA QUE LA PARTE DE COMO ESTABA VESTIDA ROCIO LA ESCRIBIO ANITA!! AMA LAS REMERAS CON LA ESPALDA DESCUBIERTA JAJAJA GENIAS CHICASSS!! MUY BUENA LA NOVELA

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  7. Si llega a hacer Celeste me muerorororo

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  8. Para mi no es Celes, no imagino a celeste cagando a Bauti y en su parte a Rocío de esa forma, es tan tranquila.
    Excelente novela Colis, gracias por tanto!!!

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  9. En mi opinión la chica morocha de ojos claros que se abalanzo sobre Nico,es sin dudas...Malena,que otra podría ser? MUY BUENA NOVELA COLIS!!

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  10. Mm no see, cuan estas muy empedo no sabes lo que haces, pero apuesto también que es malenaa ahora la colis como sabe que decimos todas malena nos caga y pone celeste Jajaja

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  11. Nico y Rocio tienen que terminar juntos si o si!!! Se aman y no se animan a aceptarlo

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  12. y si es la que se acosto con santinoo?!?!?!?! aaaay

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  13. Que buena novelaaaa!!! Me encanta ♡♡ Que Celes y Bauti sigan juntos xfavor!! Lo único que pido, tmb estaría re lindo que Rocío encuentre a alguien que ame de verdad dsp de tanta confusión.. TE ODIO VERA!!!!!!!!!!!

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  14. Dios mio, POR FAVOR 2 CAPITULOS POR SEMANA QUE ME MUERO DE LA ANGUSTIA. Ni Malena, Ni celeste, seguro una nueva jajaja Me encanta la pareja de Celes y Bauti, ojala nunca se cague. Y que vera empieze algo con otro chico, no me gusta que este con Nico. DOMINGO LLEGA YA. hermosa la novela, besos.

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  15. Ro y Nico tienen que estar juntos por favor♥ ♥♥ bauti y celes unos tiernos totales!! Amo la novela y seria buenisimo 2 capítulos por semana si pueden chicas!! Son lo mas la mejor novelaaaa me re atrapó

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  16. Fuaaa, empece a leer desde el capitulo 1 ayer y hoy ya llegue hasta el 41. La verdad te hace enganchar con las historias y los quilombos, felicitaciones

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  17. Quiero que Nico se enamore de vera y sufra,we jajaja

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