martes, 26 de marzo de 2013

Presa del silencio

A veces, para comunicarnos, no es necesario hablar. Las palabras cambian todo: manipulan, convencen, enojan, satisfacen. El silencio es más fiel y muchas veces reconforta el doble que cualquier palabra o frase vulgar. El silencio te da más poder que las palabras.
Es preferible tener como virtud saber callar antes que saber hablar. Cuando dejás de hablar de más, es ahí cuando te escuchan mejor y te comunicás de otra manera. 
Todos somos esclavos de nuestras palabras y dueños de nuestro silencio. Así que, ¿vos querés ser esclava de algo? ¿No preferís ser dueña de otra cosa?.
Algunas personas prefieren hablar porque dicen que algo "si no le ponés palabras, no es real, no existe" y en realidad ese algo era mucho más valedero y sincero cuando estaba callado, solamente en tu interior, sin salir afuera de manera textual.
Un silencio puede, en muchos casos, ser incómodo y hasta doloroso, pero ponete a pensar: cuando estás mal por algo muy importante, estás triste en serio, ¿no te hace mejor un abrazo de esa persona que tanto querés, sin decir nada, antes que una sarta de palabras unidas en forma de párrafo diciéndote el por qué no deberías estar mal? A cualquiera nos hace mejor un abrazo cálido o un beso tierno que muchas palabras...
A veces se puede lastimar más con un silencio que con una palabra
Mucha gente dice que "el que calla, otorga", pero yo creo que el que otorga es el que habla porque esa persona tiene la opción de desmentir o admitir lo que hace, por lo tanto otorga lo que considera que es correcto a la hora de hablar. El silencio siempre te da el beneficio de la duda.
Hay que saber qué decir, pero más importante es saber callar.


@Incredulas - 26/03/13

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